EDIFICIO

Edificio derrumbándose
Que los daños de la ira también alcanzan a quien la provoca 

 

BORJA, I, 66 [1581: 67]

IRAE MALUM

Los daños de la yra y de la vengança, son tan grandes, que sin duda ninguna, es tanto mayor el daño del que la haçe, que del que la reçibe, quanto son mayores los daños del alma que los del cuerpo. Esto se da a entender, en esta empressa de la ruyna y edifiçio caýdo, con la letra que dice, "Irae malum" [1], que quiere decir, "El daño de la yra". Porque assí como un edifiçio grande, quando cae, aunque todo lo que halla debajo de sí, lo deshaçe y desmenuça, pero el mismo edifiçio no queda sano y entero, sino hecho pedaços, juntamente con lo que ha destruydo, assí el que haçe daño a otro no queda libre, aunque no se vea el daño que assí mismo ha hecho, el no hecharsse de ver es, porque estamos tan çiegos, que no tenemos por daños sino los del cuerpo, siendo sin comparaçión mayores los de el alma. 

                                                                                                                               [1581: 66v] 

[1] "Los males de la ira" (Séneca, De la ira, III, 20)